6. CELEBRACIÓN: LA PRIMERA CONFESIÓN

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A)    INTRODUCCIÓN

-Seguimos en el núcleo catequético VIII (“La Reconciliación. Recibimos el perdón que nos renueva”) del Catecismo Jesús es el Señor (pág. 104-113). Después de dedicar el pasado encuentro con los padres al tema del perdón, ahora celebramos la alegría del sacramento del perdón que por primera vez van a recibir los niños y podemos renovar los mayores.

Es necesario que los niños hayan tratado en catequesis los tres temas de este núcleo catequético (35 a 37) antes de la celebración del perdón.

-La duración de esta celebración está prevista para toda la sesión de catequesis, es decir, unos 50-60 minutos.

-Se ha de invitar para que participen en la celebración a los padres y familias de los niños.

 

Material necesario:

-   Guión para la celebración de La primera confesión.

-Es conveniente que haya una cruz presidiendo la celebración. Puede ser la cruz parroquial o una cruz que se ponga sobre el altar.

-   También puede ponerse el cirio pascual apagado.

-  Un corazón grande (puede ser hecho con papel o cartulina y reforzado por detrás con cartón o con corcho) preferiblemente de color rojo.

-    Hojitas de tamaño media cuartilla para que escriban los niños y los padres. Bolígrafos. Tijeras. Papel celo.

-     Cadena hecha con eslabones de papel.

-     Aparato para reproducir música y música instrumental.

-     Cruces de madera que se puedan colgar al cuello.

-     Hojas con el examen de conciencia para entregar a los niños.

 

Material catequético complementario

-     Venid y veréis (Madrid), pág. 201-205; Conocemos y caminamos con Jesús 3 [Sevilla], pág.144-147. Vivimos la fe en la Iglesia [Región del Duero], pág. 79-81. Nos encontramos con Dios: Celebración del perdón [SM] pág. 100-107; 112-113. La Iglesia es nuestra madre 3 (Madrid), pág. 143-147. Catequesis familiar, Vida 3, libro de catequistas de padres, pág. 131-134, libro de padres, pág. 111-116.

B)  OBJETIVOS

o   Que los niños que van a recibir la primera comunión en este curso tengan la experiencia gozosa del perdón de Dios.

o   Que los padres y demás familiares de los niños que van a recibir la primera comunión experimenten también la alegría del perdón sacramental.

 

C)    DESARROLLO DE LA CELEBRACIÓN

1.   Canción inicial. Puede ser “Hola Dios”

Hola Dios, estoy aquí. Gracias te doy por darme la vida. Hazla nueva todos los días. Buenas tardes (días) mi Señor.

2.      Después del saludo del sacerdote se enciende el cirio como presencia luminosa de Jesús que quiere hacerse presente en la celebración.

3.   Diálogo inicial con los niños: Puede plantearse en los siguientes términos: “¿Para qué hemos venido hoy? Para confesarnos por primera vez. ¿Qué es confesarse? Darle a Jesús la alegría de dejarnos perdonar nuestros pecados”.

3. Lectura bíblica: Parábola del hijo prodigo. Puede ser leída por varios niños e incluso representada. También puede verse en película de dibujos animados.

Texto dialogado:

NARRADOR:En aquel tiempo contó Jesús esta parábola. Un hombre tenía dos hijos. El menor dijo a su padre:

HIJO PEQUEÑO: Padre, dame la parte de la herencia que me corresponde.

NARRADOR: Y el padre les repartió la herencia a los dos hermanos. A los pocos días, el hijo menor recogió sus cosas, se marchó a un país lejano y allí malgastó toda su fortuna a base de juergas y mala vida. Cuando lo había gastado todo, hubo en aquella tierra una época de hambre, y el muchacho empezó a pasar necesidad. Entonces se empleó como sirviente en casa de un hombre de aquel país, que lo mandó a sus campos a cuidar cerdos. El pasaba tanta hambre, que le hubiera gustado llenar su estómago con las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie se las daba. Entonces se puso a pensar y dijo:

HIJO PEQUEÑO: ¡En casa de mi padre muchos empleados comen de sobra, mientras yo aquí me muero de hambre! Voy a volver a casa de mi padre y le diré: “Padre, he pecado contra ti. Ya no merezco llamarme hijo tuyo; trátame como a uno de tus empelados”.

NARRADOR: Se puso en camino y se fue a casa de su padre. Cuando aún estaba lejos, su padre lo vio, y muy emocionado salió corriendo a su encuentro, le abrazó y le cubrió de besos. El hijo empezó a decirle:

HIJO PEQUEÑO: Padre, he pecado contra ti. Ya no merezco llamarme hijo tuyo. Trátame como a uno de tus empleados.

NARRADOR: Pero el padre dijo a sus criados:

PADRE: Traed en seguida el mejor vestido y ponédselo; ponedle también un anillo en la mano y sandalias en los pies. Coged el ternero más gordo, matadlo y vamos a celebrar un banquete de fiesta, porque este hijo mío había muerto y ha vuelto a la vida, se había perdido y lo hemos encontrado.

NARRADOR: Y se pusieron a celebrar la fiesta. Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando volvió se acercó a la casa, oyó la música y los cantos. Entonces llamó a uno de los criados y le preguntó qué pasaba. Él le dijo que su hermano había vuelto, y que su padre había matado el ternero más gordo para celebrarlo. Él se enfadó y no quería entrar. Su padre salió para convencerlo de que entrara. Pero él le contestó:

HERMANO MAYOR: Hace ya muchos años que te sirvo sin desobedecer tus órdenes, y nunca me has dado un animal para hacer una fiesta con mis amigos. Y ahora viene ese hijo tuyo que ha malgastado tu dinero llevando una mala vida, y le matas el ternero más gordo.

NARRADOR: Pero el padre le respondió:

PADRE: Hijo, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo. Pero ahora tenemos que alegrarnos y celebrar una fiesta, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado.

o  Otros posibles textos bíblicos: a) Zaqueo (Lc 19,1-10). Pistas para la interpretación del texto: Descubrir y conocer a Jesús que acude a nuestra casa, nos quiere y nos acepta como somos. Ver la experiencia de Zaqueo: sentimientos, lo que cambia en él, por qué se produce ese cambio. (Puede verse un comentario más amplio de este pasaje evangélico en el encuentro con los padres del mes anterior en las páginas 41-42).

b) Jn 15,9-12: Pistas para la interpretación del texto: Dios nos ama y quiere que permanezcamos en su amor.

4.Homilía (dialogada con los niños) sobre el perdón.

Pistas para la homilía y el diálogo.

o    ¿Qué es lo más importante que nos quiere decir Jesús con esta parábola del hijo pródigo o del padre misericordioso? Subrayar el cariño del padre que se alegra profundamente cuando su hijo pequeño vuelve a casa. Dios, nuestro Padre, nos quiere siempre porque somos sus hijos. Aunque nos apartemos de Él sigue queriéndonos y esperando que volvamos a su casa y a su amor.

o    El pecado es todo aquello que hacemos al margen del amor y sin hacer caso de lo que Jesús nos dice para nuestro bien. Pueden ser cosas que pensamos, sentimos, hacemos o dejamos de hacer. Y todo esto siempre que nos demos cuenta y lo hagamos queriendo.

o    Confesarnos es volver a Dios. Es dejarnos abrazar por Él. Es darle una gran alegría a Dios que quiere lo mejor para nosotros.

o    La confesión no es cosa sólo de niños sino de hijos. Por eso os animamos también a los padres a experimentar hoy -y con frecuencia- la alegría del perdón de nuestro Padre Dios, a través del sacramento del perdón.

5.   Leer y comentar brevemente un examen de conciencia que ayude a los niños a prepararse para la confesión.

o    Los niños van apuntando en el papel que se les entrega (media cuartilla) aquellos aspectos en que no se han comportado como Dios quiere. Toman un breve apunte que les pueda ayudar después a confesarse bien.

 

POSIBLES EXÁMENES DE CONCIENCIA:

REVISANDO NUESTRA VIDA JUNTO A JESÚS

A) Forma breve

- ¿Me acuerdo de Jesús todos los días?

- ¿Le rezo alguna oración por la mañana o por la noche?

- ¿Quiero vivir de verdad como amigo suyo?

- En casa: ¿Me porto bien? ¿Quiero a mis padres? ¿Les hago caso de lo que me dicen? ¿Ayudo sin protestar? ¿Quiero a mis hermanos? ¿Los trato con cariño?

- En el Cole: ¿Trabajo en serio? ¿Hago caso a los profes? ¿Doy buen ejemplo a los demás compañeros? ¿Procuro no estropear el material de la clase? ¿Soy buen compañero? ¿Estoy dispuesto a ayudar a los demás cuando lo necesitan? ¿Me preocupo de los compañeros a los que nadie hace caso ni presta atención? ¿Me burlo de los que no lo hacen bien en clase, o de los que siempre pierden en los juegos, o de los que no tienen tantas cosas como yo? ¿Me peleo con los demás chicos o chicas?

- ¿Quiero tener siempre la razón y que todo el mundo haga lo que a mí me gusta?

- ¿Tengo manía o envidia de alguien?

- ¿He cogido cosas que no eran mías?

- ¿Digo mentiras?

- ¿Comparto con los demás lo que tengo?

- ¿Procuro ayudar de algún modo a los pobres y a todos los que lo pasan mal?

- ¿Procuro amar a los demás como Jesús me ama?

B) Otra forma breve

a)  Jesús nos dice: vosotros sois mis amigos: ¿Quiero a Jesús como a un amigo? ¿Rezo todos los días para hablar con él? ¿Le doy gracias por su amor? ¿Le pido ayuda para ser buen amigo suyo?

b)  Jesús nos dice: Amaos los unos a los otros como yo os he amado: ¿Quiero a mis padres, hermanos y familia? ¿Se lo digo? ¿Les ayudo en casa? ¿Soy cariñoso con ellos?  ¿Soy buen amigo? ¿Procuro que los demás estén a gusto conmigo? ¿Ayudo a los que necesitan algo? ¿Pienso en los pobres? ¿Hago algo por ellos? ¿Visito a los que están enfermos de mi familia o de mis amigos? ¿Me intereso por ellos?

c)   Jesús dice: Felices los que trabajan por la paz: ¿Procuro poner paz allí donde estoy? ¿Suelo perdonar a los que hacen algo que me molesta? ¿Tardo en perdonar? ¿Controlo mis reacciones para que sean pacíficas y no hagan daño a los demás?

d)  Jesús nos dice: Felices los que tienen un corazón limpio: ¿Soy sincero y digo la verdad? ¿Estudio y colaboro en lo que puedo? ¿Hago siempre lo que tengo que hacer: estudiar, jugar, ayudar...? ¿Me alegro de que los demás sean felices y que les quieran?

C) Forma más extensa

- ¿Hablo con Jesús todos los días?

- ¿Voy a misa los domingos y días de fiesta para encontrarme con Jesús que me espera?

- ¿Me esfuerzo por conocer a Jesús y en parecerme a Él?

- ¿Me da vergüenza hablar de Jesús?

 

- ¿Soy servicial o soy egoísta? ¿Estoy deseando tener lo que otros tienen aunque no lo necesite? ¿Comparto las cosas?

- ¿Ayudo a mis padres, hermanos y compañeros o personas que lo necesiten? ¿Soy agradecido con ellos?

- ¿Soy sincero o digo mentiras? ¿Intento ser un buen amigo?

- ¿Hablo mal de mis amigos y de mis compañeros? ¿Insulto a las personas o digo tacos?

- ¿Procuro contagiar alegría a mi alrededor?

- ¿Soy agradable con los que tengo a mi lado? ¿Rechazo a los que no me caen bien?

- ¿Soy perezoso?

- ¿Me doy cuenta de que muchas veces no hago lo que debo hacer? ¿Me pongo a ver la televisión o me marcho a la calle cuando tengo otras cosas que hacer?

- ¿Gasto demasiado dinero en cosas innecesarias? ¿Me acuerdo y ayudo a los niños que no tienen dinero para comer?

- ¿Intento superar mis defectos?

- ¿Creo que soy mejor que los demás? ¿Acepto los consejos que me dan mis padres, profesores, catequistas…?

- ¿Me pego con mis hermanos, amigos y compañeros?

- ¿Tardo en pedir perdón? ¿Me cuesta perdonar?

- ¿Cuido la naturaleza y el barrio donde vivo?

D) Forma más extensa por mandamientos (Ver la hoja entregada al finalizar el tercer encuentro “La alegría de amar a Dios y al prójimo” en las páginas 35-36).

 

-       Momento comunitario de petición de perdón

Una posible dinámica para este momento: Poner una cadena de papel por delante del corazón grande (de Dios) queriendo expresar con ello que nuestros pecados son una barrera que nos impide llegar a Dios. En cada eslabón se puede escribir el nombre de una de las actitudes de pecado por las que se pide perdón comunitariamente. Mientras uno de los niños lee la petición de perdón, otro se acerca a la cadena para romper el eslabón que se refiere a esa actitud negativa. Otro niño puede pegar en el corazón grande un papel con la actitud positiva correspondiente.

- Peticiones comunitarias de perdón:

o    Dios y Padre nuestro, en muchos momentos no te hemos dado gracias por las cosas buenas que nos das: el cariño de nuestra familia, los juegos, el cole o los amigos.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    Jesús, nos hemos olvidado de hablarte y de rezarte.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    Hemos desobedecido a nuestros padres y no les hemos ayudado lo que podemos.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    Nos hemos peleado con los amigos, compañeros o hemos sido violentos.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    A veces se nos escapan algunas palabras ofensivas y algunas mentiras.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    No hemos compartido nuestras cosas con nuestros hermanos o compañeros.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    A veces somos egoístas, sólo pensamos en nosotros y nos olvidamos de los que tienen menos que nosotros.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

o    Algún día no hemos hecho los deberes, hemos molestado en clase y no hemos hecho caso a los profesores.

TODOS: GRACIAS PORQUE SIEMPRE NOS PERDONAS.

 

- En vez de las peticiones comunitarias podría rezarse todos juntos la oración del “Yo confieso”: Yo confieso ante Dios todopoderoso y ante vosotros hermanos que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a Santa María, siempre Virgen, a los ángeles y a vosotros hermanos que intercedáis por mi ante Dios nuestro Señor.

6. Después, se invita a los niños a que se acerquen a sus padres para pedirles perdón por las veces que les han hecho sufrir. Los padres les dan un beso y un abrazo.

7. Confesión individual de cada uno de los niños.

- El sacerdote motiva este momento con las siguientes palabras (u otras semejantes): “Ahora vamos a hacer con Dios, nuestro Padre, algo semejante a lo que hemos hecho con nuestros padres. Acercarnos a Él para abrirle nuestro corazón pidiéndole perdón por lo que no va bien en nuestra vida. Llevamos la hojita para ayudarnos”.

o    Se pone una música de fondo durante las confesiones.

o  Mientras los niños se confiesan, los padres pueden: escribir algún mensaje de felicitación para su hijo.

oSi se ve conveniente: después de confesarse cada niño/a, para cumplir la penitencia (normalmente hacer una sencilla oración) puede dirigirse a una zona concreta del templo (una capilla, ante una imagen…) acompañado de sus padres (o uno de ellos) o por el/la catequista que le ayudarán en ese momento.

o   Una vez que haya cumplido la penitencia, recorta su papel (en el que había anotado indicaciones sobre sus pecados) para convertirlo en un pequeño corazón y escribe (en la cara de la hoja que no había escrito) algún pequeño compromiso de cambio o una oración de agradecimiento a Dios, nuestro Padre. A continuación, se acerca al gran corazón (que representa el amor de Dios Padre) le da un beso y pega su pequeño corazón dentro de ese gran corazón.

8. Una vez acabada la confesión, se invita a los niños, padres y catequistas a expresar espontáneamente algunos motivos de acción de gracias. Si no salen espontáneamente pueden leerse las siguientes oraciones de agradecimiento:

oPor habernos creado y habernos dado este mundo tan hermoso.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR.

oPor habernos dado a tu Hijo Jesús para que sea nuestro amigo y nos enseñe el camino hacia Ti.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR.

oPor nuestros padres, profesores, catequistas y tanta gente buena que nos ayuda a ser felices.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR.

oPor habernos perdonado hoy y habernos animado a ser mejores amigos tuyos.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR.

Otra opción:

o  Tú nos perdonas siempre, nos llenas de cariño y de ternura, no te cuesta hacer las paces ni te dejas llevar por el rencor.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR, PORQUE TU AMOR NO TIENE FIN.

oComo los padres son tiernos con sus hijos, lo mismo nos tratas, Padre, tú a nosotros. Más grande que los cielos y la tierra es el amor que tienes a los que te queremos.

TODOS: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR, PORQUE TU AMOR NO TIENE FIN.

-Finalmente, el sacerdote reza una oración de acción de gracias:

Gracias Jesús porque nos has perdonado. Nos has abrazado y nos has besado como hizo el padre de la parábola con el hijo que se había ido. Cuando tú nos amas y nos perdonas, nuestro corazón crece. Y así nosotros podemos también amar y perdonar a los demás. Muchas gracias, Jesús.

9. Cada niño/a se acerca en fila a los pies del altar para que su catequista (o el sacerdote) le entregue una cruz de madera (signo del amor de Jesús que murió en la cruz para perdonarnos los pecados. Puede escribirse en la cruz la fecha de la primera confesión). El niño/a la besa con cariño y su catequista (o el sacerdote) se la pone al cuello, antes de volver a su sitio.

Mientras se entregan las cruces puede cantarse alguna canción como, por ejemplo, “Tomado de la mano”, “Si en verdad Dios te ama” o “Manos abiertas”.

Tomado de la mano

Tomado de la mano con Jesús yo voy, le sigo como oveja que encontró al pastor, tomado de la mano con Jesús yo voy a donde Él va.

Si Jesús me dice: “Amigo, deja todo y ven conmigo donde todo es más hermoso y más feliz”. Si Jesús te dice: “Amigo, deja todo y ven conmigo”. Yo mi mano pondré en la suya e iré con Él.

Tomado de la mano con Jesús yo voy, le sigo como oveja que encontró al pastor, tomado de la mano con Jesús yo voy a donde Él va.

Si en verdad Dios te ama

Si en verdad Dios te ama da las palmas (2). Si en verdad Dios te ama, demuéstralo en tu vida. Si en verdad Dios te ama, da las palmas.

Si en verdad Dios te ama taconea (2). Si en verdad Dios te ama, demuéstralo en tu vida. Si en verdad Dios te ama, taconea.

Si en verdad Dios te ama di que bien (2). Si en verdad Dios te ama, demuéstralo en tu vida. Si en verdad Dios te ama, di que bien.

Si en verdad Dios te ama di Jesús (2). Si en verdad Dios te ama, demuéstralo en tu vida. Si en verdad Dios te ama, di Jesús.

Qué suerte es tener un corazón sin puertas

Qué suerte es tener un corazón sin puertas, que suerte es tener las manos siempre abiertas.

Manos abiertas para estrechar las de un amigo. Manos abiertas para ayudar en el camino.

Manos abiertas, las de Jesús, las del Maestro. Manos abiertas las del que supo amar primero.

Manos abiertas, llenas de de amor las de María. Manos abiertas, ellas son nuestra luz y guía.

10. Todos juntos rezan el Padrenuestro (con las manos unidas en torno a la cruz) y después reciben la bendición final del sacerdote.

11. Puede hacerse una foto recuerdo de los niños con catequistas y otra también con sus padres.

12. Si hay tiempo y se ve conveniente puede acabarse con una pequeña merendilla en la que se comparta lo que los niños han traído.